Los rayos del sol caminaban por el cielo engrandeciendo a cada paso un amanecer con una ternura muy suculenta que daba resquicios de encontrar un sensible día de belleza inaudita.
Ella sonreía por su despertar maravilloso que se le presentaba después de la noche de andar por tormentos malignos para el sueño.
-¡ Quiero vivir ! - se decía con radiante luz en su resplandor....
- ¿Será el día que mi corazón se llenará de amor ?- fue su reacción a ese mundo que veía de luz y alegría tras su ventana.
Contemplaba como los pájaros volaban cerca de ella para saludarla; las flores le sonreían con su baibenes y contoneos; los grandes árboles y palmeras , la saludaban con majestuosidad y sonrojo...pues a pesar de estar sin arreglar, la belleza de su imagen permanecía elegante y maravillosa...
Su baño fue un sueño de momentos sin palabras . Al correr el agua por su cuerpo desnudo, sentía como caricias suntuosas que le llevaba a un gozo genial... era todo seducción lo que la envolvía en aquel lago de agua en el que se sentía adentrarse. Su excitación hacía que su mente divagase por el mundo para encontrar un paisaje de belleza en los alentadores bosques y praderas de la felicidad.
Desayunó como cada mañana y salió a contemplar la vida que se le abría de par en par. La sensación que le inundaba su cuerpo era como si todo el mundo le quisiera agradecer una buena acción . Sentía como los abrazos de felicitación le llegaba ... era el día que dejaría el pesimismo para adentrarse en el optimismo halagador.
Caminando por el parque que separaba su casa de los grandes almacenes donde se dirigía, una voz le sumió en un acogimiento de incertidumbre.
- ¿ De dónde vendrá las voces ? - era la pregunta que se hacía al no contemplar alma que la saludase. El ruido de coches le provocaba confusión... y la cantidad de transeúntes por todos lados la llevaba de dudas a cual personar saludar.
De pronto, y sin percibir su llegada, se encontró con un amigo que llevaba mucho tiempo sin verlo.
- ¡ Hola Esmeralda ! - te acuerdas de mi... soy Françoise.
Ella absorta por la contemplación que hacia de aquel chico, se sintió como su boca se cerraba para no producir palabra alguna. Su saliba no se encontraba en su paladar y sentía como un remordimiento le llenaba el cuerpo. No sabía si llorar , reír, besarlo, tocarlo ... Al final de esos instantes preliminares de la conversación, reaccionó para decirle:
- ¡ Hola, Françoise !, ¿que tal estás ? ¿cuánto tiempo sin verte ? -
- ¡ Esmeralda, siento haberme ido sin decirte nada !, ¡ Tuve que partir para París por motivos muy personales !.
El chico tenía aún la sonrisa en su rostro pero , ante la poca alegría que había demostrado su inesperada sorpresa; sintió un bajón emocional que le llevó a dejar la sonrisa y adentrarse en un abatimiento desmesurado.
-¡ Siento no haberte dicho nada, siento no haber tenido palabras para ti !, ¡ quiero que sepas que tuve que irme porque mi padre se puso muy enfermo ! .-
- ¿ Está mejor ? - , ¡ si , gracias a Dios !. Hemos pasado unos días muy tensos...
- ¡ Es normal !-
- ¡ El tiempo se pasa muy rápido !, - ¡ En tres meses , nunca hubo tiempo para decirme que ocurría !.
- ¡ Me sentí sola, decaída por a la ausencia de todo !. - ¡ si te fuese pasado a ti, igual no estabas con esa sonrisa ! .
Podemos hablar tomando un café y quitarnos de en medio de la calle. -¡ Cálmate, mujer !-, puedo explicártelo.
Pasaron el parque con dirección al bar de enfrente . Allí hablarían para aclarar las desavenencias del encuentro fugaz.......
Autora : FLOR BELLA....
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